¿Cómo reducir de nuestra dieta el consumo de azúcar?

Si usted ha observado que últimamente siente un deseo obsesivo, incontrolable e imperioso de ingerir alimentos ricos en azúcar a cada instante y le preocupa que tal vez esto le puede afectar negativamente su salud o es diabético y debe evitar el azúcar, tome medidas de inmediato, pero ¿Cuáles?

Existen ciertas medidas que se pueden seguir para poder reducir el consumo de azúcar y que detallamos a continuación:

Reduzca el consumo de dulces

El primer paso consiste lógicamente en consumir menos dulces (galletas, frutas en almíbar, cereales azucarados, las tortas y pasteles, etc.).

Reduzca la cantidad de cafeína que consume

Es necesario reducir (o eliminar del todo) la cafeína (que se consume en bebidas como el café, el té y las sodas o refrescos carbonatados). Debido a que cafeína estimula la producción de insulina y al elevarse el nivel de esta hormona en la sangre, se comienza a sentir hambre y luego se hace casi imposible resistir la tentación de ingerir alimentos dulces para satisfacer el apetito.

Mantenga un régimen de alimentación adecuado

Es necesario comer en un horario establecido. Si se come a cualquier hora, el organismo se desconcierta y empieza a depender cada vez más de las llamadas meriendas rápidas (como barras de chocolate, galletas, confituras y dulces o a una taza de café) para calmar el hambre y mantener el nivel de energía que necesitamos.

Coma frutas frescas si desea una merienda rápida durante el día

Si siente un deseo fuerte de comer una merienda rápida, consuma una fruta, ya que la fructosa (el azúcar natural presente en las frutas) se metaboliza mucho más lentamente que el azúcar refinado (o blanca) y, por ello, este tipo de alimentos tan sanos ayuda a estabilizar el metabolismo y el nivel de azúcar en la sangre.

Aprenda a identificar el azúcar que está encubierto en los alimentos

A veces consumimos productos donde el azúcar está escondido y resulta muy difícil y, a veces, imposible de poderlo detectar tan sólo por el sentido gustativo.

Este tipo de azúcar es aquél que se encuentrá en los preservativos que ayudan a mantener en buen estado de conservación los alimentos; la que se utiliza para impedir la deterioración bacteriana; para aumentar la acción de las levaduras y para balancear la acidez de algunos productos. Inclusive, se agrega azúcar a la sal yodizada con el fin de estabilizar el yodo que se agrega al cloruro de sodio).

Una forma de identificarlo y así reducirlo de nuestra alimentación consiste en aprender a interpretar la información que aparece en las etiquetas y envases de los productos que compramos en el supermercado.

Usualmente las etiquetas de muchos productos refieren el contenido de azúcar con varios nombres como sacarosa, fructosa, glucosa, sirope de maíz, lactosa, y maltosa

Otro método consiste en fijarse en el orden de los ingredientes que aparecen en las etiquetas. En términos generales su importancia va en orden de importancia según las cantidades empleadas. Si el azúcar aparece en primero o segundo lugar en la lista de ingredientes, significa que el producto en sí debe contener azúcar en cantidades considerables.

En otros casos, el azúcar (con los nombres antes mencionados) aparece al final de la lista de ingredientes para crear la falsa idea de que el producto contiene poca azúcar.. Sin embargo, si se suma todos las cantidades, se descubrirá que el producto contiene mucha azúcar.

Use los edulcorantes artificiales con mesura

Muchas personas usan los edulcorntes (o endulzantes) artificiales porque consideran que así no aumentarán de peso. Sin embargo, si se consume indiscriminadamente lo más probable es que no sea efectivo.

Existe otro riesgo en la lucha por la reducción de azúcar con los edulcorantes, ya que con su empleo, continúa los deseos por lo dulce ya que no se ha reeducado el paladar. Esto significa que si en un momento determinado del día no tenemos a nuestro alcance un endulzante artificial, seguramente recurrimos a las sodas o refrescos que contienen azúcar blanca.

No se deje vencer

Si a pesar de todos sus esfuerzos ha caído en la tentación un helado de chocolate, y después la agobia un sentimiento de culpa, eso no significa que debe abandonar su lucha por reducir el azúcar.

Debe seguir con su plan con la convicción de que podrá renunciar a los dulces y verá que podrá vencer su problema más pronto de lo que piensa.

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